Hola amigas, soy Argelia nací y vivo en Blimea y me dijeron que contara algo de mí.
Bueno que puedo decir, que nací en febrero de 1934, hija de un minero, que fecha para venir al mundo, ¿verdad?. Como sabéis en eses feches los guajes teníamos que facer de todo, desde ir a por el agua, lindiar las vacas y a carriar leña, etc...bueno que estábamos para multiusos, a los 9 años empecé a ir a rebuscar carbón, con un hermano que tenía 13 años. Madrugábamos, pues a las 8 de la mañana empezaban en el lavadero y descargaban vagones en la escombrera. Luego íbamos para casa y yo a veces iba a la escuela, pero a las once tenía que salir para ir a llevar la comida a mi abuelo y a un tío, y tenía que ir hasta Santa Bárbara, al pozo del Socabón que luego le pusieron "cerezal".
A las 11 años andaba con dos caballos sacando trito del río y teníamos que cargar a palaes, un señor y yo a palada cada uno, y mientras yo iba con los caballos, el señor preparaba otro viaje, imaginar cuántas veces los caballos al pasar el río pisaban mal y caían. Había que quitar la carga, ¿imaginais para una guaja de 11 años?, pero mi padre decía que yo podía con todo.
A los 14 años entré a trabajar en la "teyera" que había aquí en Blimea, no hacia tejas, sino que eran ladrillos para hacer las casas de la barriada. La jornada era de 12 horas, pero cuando había que llenar el horno se trabajaban hasta tres turnos, osea 36 horas, pero luego dormía 24 horas.
Me casé muy joven me faltaban dos meses para cumplir 16 años, fui madre a los 16, abuela a los 37 y bisabuela a los 59 años.
No pensar que fue fácil, después de casada, pues la felicidad no dura mucho...pues no llevábamos 12 años de casados cuando mi marido de unas pulmonías enfermó tanto el pobre que vivió 18 años con oxígeno, y no podía ni atarse los zapatos, pues no oxigenaba la sangre y tenía que estar todo el tiempo haciendo aspiraciones para que le llegara el oxígeno. A veces tenía que ayudarle a respirar apretándole el pecho para ayudarle "como hacer ahora con ese aparato para reanimar en los infartos".
Quedé viuda a los 45 años a los 7 meses empecé a trabajar en una cafetería, limpiando pues de pensión me quedó 8000pts. y alguna deuda pues cuando mi marido estaba bien nos pusimos a hacer una vivienda y la debíamos.
Luego en 1986 entré en la bolsa de trabajo limpiando ambulatorios, pero eran algunos meses por las vacaciones y entonces me dedicaba a cuidar a alguna señora, trabajé de pinche de cocina pero también eventual y cuando me dieron plaza fija ya no pude cotizar para la paga completa, aunque trabajé hasta los 70 años y solamente me quedaron 500 euros, y con los 270 € de la paga de viudedad voy viviendo. Procurando dar a la vida la importancia que tiene pero con un pizca de despreocupación porque sino lo haces así deseguro que te derrumbas. Así que procuro dar bienestar a mi alrededor y disfrutar con familia y amigas y con esto de "Tiempo Propio" me valió mucho. También participo en un programa de Radio, en Radio San Martín, en el 107 punto uno de la F.M, que se llama " con sentimiento".
Bueno amigas una abrazo muy fuerte para todas las mujeres de Tiempo Propio de Asturias.
Después de escuchar está historia tan emocionante de lucha y superación, las socias de nuestra vocalía no dudamos en que Argelia es merecedora de este reconocimiento de mujer dinámica y participativa. Nosotras que la conocemos y hemos oido sus historias en la vida, queremos añadir unos cuantos apuntes que ella, igual por modesta, se le han olvidado.
Es una gran lectora desde los tiempos en que empezó a leer. Con 6 años aproximadamente, le quitó a su madre "5 pesetas", en aquellos tiempos...para poder comprar un libro titulado "Osito Pimpo". Ya de adulta, leía a su vez en voz alta, a su marido enfermo en cama y a su nieto en otra habitación.
La llegada al "Programa Tiempo Propio" fue en el 2003. Ella se enteró que había unos talleres pero quedó en reserva, y tuvo la gran suerte de entrar ese mismo año. Cada fin de curso, en la clausura del programa ella escribía para agradecer a las monitoras y al Instituto Asturiano de la Mujer por seguir con el programa.
¿qué supusó para ella el programa? Pues conocer gente, tener una obligación de salir de casa con la ilusión de ir a aprender cosas nuevas en cada taller.
Los intercambios fueron importantes como enriquecimiento cultural y conocimiento de otros municipios que participaban también en el programa, así como conocer mujeres de toda Asturias que estaban viviendo las mismas experiencias.
Cuando terminó el programa se apuntó a esta asociación sin dudarlo. Sus compañeras, amigas de esta vocalía opinamos cosas muy positivas sobre ella. Transmite alegría, es dinámica, divertida, parlanchina, ingeniosa en cada actividad que participa. Además, cuando las subvenciones empezaron a reducirse, ella se ofreció para darles un taller de memoria. Las socias están muy agradecidas por ello.
Además de cultivar el intelecto, las socias de aquí realizan distintas excusiones, donde ella ameniza el viaje, con algún monólogo, con una canción, con un chiste,...
Celebran todas las fiestas...carnavales, comida de navidad, comadres. Y en primavera y otoño salidas a la zona rural.
Argelia sabe gestionar muy bien su tiempo propio. A parte de su participación activa en la asociación colabora en la parroquia y en la asociación de vecinos. Es poeta y cantarina, no obstante es componente del coro parroquial de Blimea.
Muchas gracias por tu energia!!
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