MI PRIMERA COMUNIÓN
Recibí mi primera comunión el 17 de
mayo de 1953, en la Iglesia Parroquial de Santa María Real de la Corte, la
iglesia está situada en la calle San Vicente frente a la plaza de Feijoo en Oviedo
(Principado de Asturias). La iglesia comparte medianeras con el claustro y el
edificio del Monasterio de San Vicente (hoy Museo arqueológico de Asturias) al
que perteneció, y con la iglesia del Monasterio de Benedictinas de San Pelayo, contigua
a su cabecera se encuentra la catedral.
Vivíamos en la calle Rafael, Mª de
Labra con la abuela Tatita, mi tía Magdalena, su marido Eduardo y sus hijos Pilar,
Eduardo y Alberto, mis padres eran Ángel y María, mis hermanos Ángel, Loly, Juan
José Antonio y yo Mª Jesús. La a era la abuela Tatita era la guía de la
familia.
El sábado cuando nos fuimos a la cama
(yo dormía con mi hermana Loly), mi madre dejó preparada la ropa de mi
1ª Comunión, el vestido blanco
de organdí era de lorzas, tenía dos faldones, uno almidonado para darle forma
al vuelo de la falda, el velo con una diadema de flores llegaba a la cintura,
la limosnera redonda iba unida a un cinturón de organdí que acababa en un gran
lazo a la espalda, guantes blancos, misal de nácar y rosario. El vestido era de
la familia con él recibimos la primera comunión varias niñas de la familia.
El domingo cuando mi madre nos
despertó era un día de sol y fiesta familiar para todos, el armario de mi
habitación era de luna con un espejo grande cuando mi madre y tatita me
vistieron me llevaron al espejo, me ví como una novia pequeña pero grande de
felicidad y alegría.
Al entrar en la iglesia llena de luz
y flores nos colocaron los niños a la derecha y las niñas a la izquierda.
Nuestras madres y abuelas llevaban
ropa negra y mantilla, no estaban de luto, era la moda.
Ofició la eucaristía Don Feliciano,
el párroco. Al terminar la celebración sortearon dos corderos pequeños, él de las
niñas le correspondió a la fila cuatro, niña nº 4 a Mª Jesús (que soy yo).
Rodeada de mi familia y con el lechazo en brazos de Tatita nos fuimos para casa
donde nos esperaba una gran comida: patatas guisadas con carne de huerta
(cebolla, ajo, laurel, etc.) de postres: galletas, dulce y chocolate.
Por la tarde fuimos de procesión por
el centro de Oviedo hasta el paseo de José Antonio (hoy paseo de los Álamos),
donde se celebraba un encuentro de la Adoración Nocturna Española, en el Altar
instalado para el Evento, ofició la Eucaristia el Obispo de la Dioceis de
Oviedo, Don Francisco Javier Lauzurica.
Así viví y así recuerdo el día de mi 1ª
Comunión.
Mª Jesús Rodríguez Reyes (Vocal de
Lugones)
¡¡¡MUCHAS GRACIAS!!! a Mª Jesús compartir con nosotras sus recuerdos tan bonitos.
Emonción al leer está historia. Recuerdo el día de mi comunición como algo también muy importante. Gracias. Bego
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ResponderEliminarQue guapísima estabas, que niña tan bonita!!!
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